CLIENTES INDESEABLES

Manteniendo la cordura para no afectar tu negocio

Alguna vez se nos ha cruzado ese cliente que nos supera y pone a prueba nuestra paciencia.

Bueno, hoy vamos hablar de esos clientes indeseables compartiendo algunos tips para saberlos controlar sin perder la cabeza.

1. Identificando sus red flags

Identificar a esos clientes indeseables desde el principio es prácticamente una regla básica.

Son esas red flags (banderas rojas) o signos de advertencia que todo emprendedor debe detectar de inmediato.

Demandas de atención exageradas, constantes quejas sin razón alguna y formas irrespetuosas de comunicarse son signos de un cliente indeseable.

Al identificar estos comportamientos desde el inicio se puede estar preparado a lo que pueda venir.

2. Saber decirles sin miedo «NO»

Establecer límites claros desde el principio es crucial.

Esto significa establecer y comunicar tus políticas en cuanto a términos y condiciones se refiere.

Es una manera directa, firme y legal de defender tu trabajo en el espacio al cual te dedicas.

No tengas miedo de decirle «no» cuando sea necesario a ese cliente indeseable.

3. Ser empático con inteligencia

En ocasiones, te puedes encontrar con clientes frustrados o con falta de comprensión y no hallan otra forma que desahogarse contigo.

Como emprendedores también se torna complicado lograr entender la perspectiva de este tipo de clientes.

Para ayudarlos de una manera más efectiva, la empatía hasta cierto punto puede calmar la tempestad encontrando una solución mutua.

Esto siempre y cuando el cliente lo desee y acepte.

4. Manteniendo la calma

Cuando te encuentras en situaciones desafiantes con clientes indeseables, mantener la calma es la mejor opción.

Como lo he dicho en otros artículos, la paciencia es una virtud que se está perdiendo entre las personas.

No es fácil lidiar con gente que piense diferente a nosotros y más si su comportamiento llega a ser tóxico.

¿Cómo enfrentarlo?

Manteniendo la calma sin perder la compostura.

Es saber abordar el problema con la serenidad y profesionalismo que debe destacarse por encima de cualquier situación.

5. Aprende de ellos

Existe un refrán muy popular que dice: «de los errores y las malas experiencias se aprende.»

Cada encuentro con un cliente indeseable es una oportunidad para aprender y crecer.

Reflexiona sobre lo que salió mal y considera cómo podrías manejar la situación de manera diferente en el futuro.

Estas lecciones fortalecen tus habilidades y a mejorar tus relaciones con los clientes en general.

Finalizando, lidiar con clientes indeseables no es el fin del mundo.

Con paciencia, carácter y un poco de empatía, puedes soportar cualquier encuentro incomodo y salir más fuerte del otro lado.

Recuerda siempre establecer límites claros y aprender de la experiencia.